martes, 20 de mayo de 2014

Vodafone en problemas

La paciencia parece ser la mejor virtud de Vodafone, aunque los inversores del operador de telecomunicaciones británico todavía necesitarán una buena dosis de resistencia para aguantar hasta el año que viene.
El consejero delegado del grupo, Vittorio Colao esperó varios años para conseguir un precio inmejorable por la participación de Vodafone en el operador estadounidense Verizon Wireless. La operación proporcionó a los accionistas una rentabilidad sobre el capital de 85.000 millones de dólares.
No obstante, puede que los inversores estén menos dispuestos a tolerar el bajo nivel de beneficios mientras esperan que el proyecto conocido como Project Spring, que tiene un coste de 19.000 millones de libras, proporcione los rentabilidad deseada. Al final, la trayectoria de Vodafone no parece ser fácil.
Las acciones de la empresa cayeron casi un 5% el martes después de que declarara una caída de los beneficios antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización de entre el 7% y el 11% en el año hasta marzo de 2015. En el punto medio del margen de Vodafone, eso es un 4% por debajo de las previsiones de consenso de los analistas.
Las desalentadoras previsiones dan a los inversores pocas esperanzas de que Vodafone haya superado los problemas en algunos de sus mercados más difíciles. La guerra de precios prosigue en Italia, donde las ventas cayeron un 18,3% en el cuarto trimestre. Y la compañía sigue invirtiendo en Alemania para intentar cambiar la mala percepción que se tiene sobre la calidad de su red: el ebitda cayó casi un 25% en el segundo semestre del año.
Es verdad que a largo plazo Vodafone parece una buena apuesta. Dispone de recursos más que suficientes para hacer grandes inversiones en redes y distribución con el objetivo de volver a llevar la batuta a la hora de fijar los precios.
Se espera que ese gasto genere un flujo de caja libre gradual de 1.000 millones de libras en 2019. Vodafone también muestra un espectacular ritmo de crecimiento en los mercados emergentes, que representan un tercio del ebitda del grupo.
Pero los inversores podrían optar por no pasar por alto el riesgo de que sigan cayendo los beneficios. Excluyendo los altos costes relativos al Project Spring. Vodafone cotiza a casi 6,5 veces el ebitda previsto en 2015, más o menos en la línea de sus rivales europeos. Si no repuntan los beneficios en Europa, la mejora a corto plazo de ese dato parece difícil de justificar.
Lea el artículo original publicado en The Wall Street Journal Vodafone Investors Face Waiting Game
Más información en www.europe.wsj.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario